La Guardia Civil sorprende a dos furtivos cuando regresaban de abatir un ciervo
Agentes de la Guardia Civil de la localidad cacereña de Aliseda sorprendieron el pasado 9 de enero a dos hombres que llevaban en el maletero de su coche un rifle y una cabeza de ciervo, además de un silenciador, prismáticos y más artículos que utilizaron para furtivear en la Sierra de San Pedro. A la mañana siguiente, los agentes localizaron el cuerpo de un venado descabezado en una finca del término pacense de Alburquerque.
Agentes de la Guardia Civil pertenecientes al puesto de Aliseda, en Cáceres, soprendieron a dos hombres, vecinos de la misma localidad, con un rifle y una cabeza de ciervo en su vehículo. La detención se produjo el 9 de enero.
Pruebas encontradas por la Guardia Civil en el maletero del coche.
Esta operación ha sido resultado de diferentes actuaciones que se están llevando a cabo en la Sierra de San Pedro en contra de acciones de caza ilegal. El objetivo es evitar dichas acciones o sorprender a los posibles cazadores furtivos.
Los agentes localizaron en el interior del maletero del vehículo un trofeo de venado de grandes dimensiones (13 puntas), un rifle, un silenciador, dos prismáticos, dos walkies, un hacha, un cuchillo y dos navajas. Todo ello indicaba que venían de furtivear, a pesar de que declararon que el trofeo lo habían encontrado en una finca próxima.
Continuando con las investigaciones, la Guardia Civil localizó durante la mañana del día 10 un ciervo de grandes dimensiones con la cabeza cortada. El cuerpo se encontraba en una finca situada en la Sierra de San Pedro, en el término municipal de Alburquerque, coincidiendo por sus dimensiones con el ciervo abatido por los cazadores furtivos.
La Guardia Civil ha abierto diligencias contra los dos vecinos de Aliseda sorprendidos, en calidad de investigados, como supuestos autores de un delito contra la protección de la fauna.
Informa hoy.es
Hay sólo 1 comentario. Yo sé que quieres decir algo:
Antes, se delinquía con la caza furtiva para comer. Ahora, aún existiendo necesidades se deja una rés entera en el campo por el capricho de llevarse unas cuernas.
Triste, además de cornudos, furtivos (ladrones).