El 33% de las ratas de las alcantarillas de Barcelona portan la leishmania

3 julio, 2019 • Noticias de caza

Según un nuevo estudio pionero en Europa, las alcantarillas de Barcelona albergarían alrededor de 200.000 ratas, de las que el 33% portarían el virus.

 Según la OMS, la enfermedad produce entre 20.000 y 30.000 muertes en todo el mundo a lo largo del año.

Redacción | Un nuevo estudio de la Agencia de Salud Pública de Barcelona (ASPB) —cuyo trabajo de campo fue realizado entre 2016 y 2017—, ha estimado la población de ratas que viven las alcantarillas de Barcelona en 200.000 ejemplares. Este dato por sí sólo dice poco, sin embargo, hay que tener en cuenta que estos roedores son los culpables de lo 40% de los contagios de enfermedades de animales a humanos.

Este estudio es el primero realizado en cuanto a censos de ratas de alcantarilla en España y Europa. El estudio se encuentra bajo el marco del proyecto BCNRats que, según distintas revistas científicas, pretende conocer y poner en conocimiento los riesgos que generan estos animales para poder controlarlos de una manera más eficiente.

Para realizar esta investigación, se han colocado 30 trampas en cada tramo de 90 metros a través de los más de kilómetros de alcantarillado que posee la ciudad condal; todo ello a lo largo de cuatro noches consecutivas.

El conteo de la parte visitable de la red arroja un resultado de 106.739 ratas, sin embargo, después de realizar una estimación, los investigadores llegaron a la conclusión de que el número total llega hasta las más de 200.000. No obstante, los investigadores ya han avisado de que las características de las partes no visitables del entramado son distintas porque lo que estos números se resumen en una mera estimación. Además, alertan de una «explosión demográfica cíclica de la especie» en el último año.

Por otra parte, advierten de que una serie de características de los sumideros y las conexiones subterráneas pueden hacer que la concentración de ratas varíe según la zona; si bien, siguen investigando acerca de ello.

Ratas, portadoras de diversas enfermedades

Los investigadores han comprobado que, a diferencia de otras poblaciones de roedores en Europa, las ratas de Barcelona no resisten a los venenos utilizados contra los roedores. No obstante, los datos que más preocupan son los porcentajes de prevalencia de patologías de las que serían portadores estos animales.

En concreto, los científicos en colaboración con personal del Hospital Clínic y la Universidad de Valencia, han hallado una prevalencia del 59% de la bacteria Listeria y del 71% de la Escherichia coli en una muestra de 212 roedores; cifras que preocupan sobremanera a los investigadores.

Otro dato sorprendente del estudio es la alta prevalencia del protozoo Leishmania infantum -del 33,3% en los ejemplares del alcantarillado-, causante de la leishmaniosis visceral y cutánea en perros y humanos en el sur de Europa. No obstante, lo más llamativo, según destacan desde el equipo investigador es que las ratas son un portador poco común de esta enfermedad, pero uno de los que más riesgos conlleva por su cercanía en los núcleos urbanos a humanos y canes.

Por este motivo, explican que son de vital importancia los cuidados preventivos en nuestros perros.

Contagio e incidencia

Tal y como informa la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año se producen 1,3 millones de contagios. De todos ellos, se producen entre 20.000 y 30.000 muertes en todo el mundo.

Estos contagios se producen por las picaduras de flebótomos, insectos dípteros similares a los mosquitos, aunque más pequeños, que cuando pican a animales que actúan como reservorios de la leishmania —como zorro, conejos, liebres o ratas—, se infectan. Una vez en el aparato digestivo de estos insectos, el parásito se multiplica.

En este punto, hay que reseñar que sólo la hembra del insecto puede transmitir la enfermedad inoculando el parásito a otro animal o persona a través de la piel.

Síntomas principales

Se estima que existen 14 millones de personas parasitadas en todo el mundo, sin embargo, la mayor parte de estas tan sólo son portadoras, manteniendo el virus latente en su organismo. En estos casos, no se llegan a presentar síntomas.

Asimismo, hay que tener en cuenta que estos signos de aparición de la enfermedad son distintos para las dos vertientes de la patología. En el caso de la leishmaniasis visceral se suele presentar febrícula en los primeros estadios de la enfermedad, así como malestar generalizado y falta de fuerzas, pasando más tarde a inflamación del hígado y del bazo.

En el caso de la leishmaniasis cutánea, puede aparecer una pequeña roncha que no cicatriza y que termina en una úlcera que supura y puede tardar incluso años en remitir.

Las pruebas que se pueden realizar para diagnosticar la enfermedad consisten en una punción en el esternón para extraer una muestra de la médula y realizar un análisis para visualizar el parásito dentro de las células, así como análisis inmunológicos a partir de un cultivo de la zona biopsiada.


Hay sólo 1 comentario. Yo sé que quieres decir algo:

  1. Olver dice:

    En caso de ongestion cárnica de la Caza, pude ser infectada la persona.
    Gracias.

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