UPA Guadalajara solicita un modelo de caza que no limite la actividad ganadera y agrícola
La manifestación de cazadores programada para el 20 de mayo en Guadalajara es causa de sorpresa para la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos. Desde UPA Guadalajara se alega que son los agricultores y ganaderos los que conservan la naturaleza y el medio rural, que además reciben en muchas ocasiones presiones de los «responsables cinegéticos» y alcaldes de muchos municipios para no denunciar los daños causados por especies ciengéticas.
Campo agrícola afectado por los conejos.
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos, UPA de Guadalajara quiere manifestar su sorpresa ante las reacciones y reivindicaciones que han motivado la manifestación convocada por la Asociación de Titulares de Cotos, Cazadores y Actividades Afines al sector Cinegético de Castilla-La Mancha, ATICA, para el próximo día 20 de mayo en Guadalajara.
Al respecto a los daños de fauna cinegética en los cultivos, desde UPA Guadalajara se solicita a la Dirección Provincial de Agricultura que agilice los trámites lo máximo posible para la realización de controles poblacionales y, caso de que fuera necesario, se modifique la normativa, “para que los permisos para control cinegético sean realmente efectivos, y que no llegue el permiso cuando los daños ya se han producido”, ha recordado Cipriano Ramiro, secretario general de UPA Guadalajara. Desde la organización agraria demandan que donde los daños sean recurrentes sea suficiente la comunicación a la Administración para realizar los controles cinegéticos fuera de las zonas de emergencia cinegética, o que las mismas se amplíen.
En cualquier caso, la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Guadalajara quiere expresar su sorpresa ante esta reivindicación por parte de los cazadores, pues en muchos casos son los propios gestores de los cotos los que se niegan a hacer estos controles poblacionales.
Por otro lado, UPA Guadalajara ha manifestado que quienes mantienen y conservan tanto la naturaleza como el medio rural, quienes habitan los pueblos de la provincia de manera continuada y permanente, son mayoritariamente agricultores y, sobre todo, los ganaderos de extensivo.
A este respecto desde UPA Guadalajara denuncia que muchos agricultores y especialmente ganaderos reciben presiones por parte de los responsables cinegéticos y los alcaldes de muchas localidades para que no denuncien los daños provocados por la fauna cinegética, y para que no pasten en determinadas zonas mucho tiempo antes de que se vaya a realizar una cacería, haciendo imposible la actividad ganadera. Según la organización agraria en la provincia se da la circunstancia de que en muchos municipios se deniegan los pastos a los ganaderos, siendo la causa las supuestas molestias por parte del ganado a la caza, lo cual es totalmente falso, según indica UPA Guadalajara.
En la UPA afirman que en la comarca de Molina de Aragón-Alto Tajo la situación se está haciendo insostenible para muchos agricultores y ganaderos, y la caza se está convirtiendo en un actor activo de despoblación. Si no sacasen provecho solo unos pocos que no viven en la comarca, además de ser perfectamente compatible con la actividad agrícola y ganadera, podrían ser un motor de desarrollo.
Desde UPA Guadalajara se solicita una caza con gestores profesionales y socialmente sostenible, que realmente contribuya a fijar población, que sea compatible y no limite, ni imposibilite, la actividad agrícola y ganadera, así como otras actividades tales como la turística y que no imponga su poderío económico. Pues según la organización agraria, de dichos beneficios poco se aprovechan realmente la mayoría de los habitantes del mundo rural, sobre otras actividades y sobre la forma de vida de agricultores y ganaderos.
Finalmente, UPA Guadalajara pide que no se utilicen los intereses y problemas de agricultores y ganaderos como arma política por parte de nadie, y recuerdan que sin agricultores y ganaderos el mundo rural estará despoblado y empobrecido.
Informa guadaque.com