Una sentencia dictará si se puede o no cazar en el donostiarra monte Ulia

La continuidad de la caza en el monte Ulia se encuentra de nuevo en el aire, a pesar de que el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) dio en marzo la razón a los cazadores en su defensa de esta actividad, que había anulado una orden foral dictada en 2012 por el Ejecutivo de Bildu para el monte que comparten los municipios de San Sebastián y Pasajes. Ahora, es el Consistorio de esta última localidad el que ha optado por presentar un recurso de casación ante el Tribunal Supremo en contra de la autorización de la caza en el lugar, por lo que no es seguro que los aficionados a esta práctica puedan disfrutar de ella el próximo otoño en este emplazamiento, tal y como preveían. San Sebastián, por su parte, no ha recurrido.

Tras la sentencia del TSJPV, la Diputación de Gipúzcoa, liderada por Markel Olano (PNV), se encontró ante el dilema de recurrir la decisión judicial y defender así que se dé luz verde a la caza en Ulia o no hacerlo, con lo que caza quedaría permitida de facto. Hay que recordar que hay distintas sensibilidades dentro del Gobierno foral ya que el líder del ala socialista, Denis Itxaso, era concejal de Medio Ambiente de San Sebastián cuando comenzaron las acciones tendentes a prohibir la caza en este monte. Finalmente, el ente foral optó por no recurrir la decisión ante los tribunales, pero sí lo ha hecho el municipio de Pasajes.

El presidente de la Federación de Caza de Gipúzcoa, José Ángel Zaldua, sigue defendiendo que se permita cazar palomas y malvices en los puestos de Ulia que, según el TSJPV, son “tradicionales”, uno de los argumentos empleados para no prohibirlos.

Zaldua explica que “ahora hay que esperar a ver si el Supremo admite el recurso de Pasajes o no”. Si no lo hace, los aficionados podrán ir a Ulia de septiembre a noviembre, que es cuando se desarrolla la temporada en el lugar. Sin embargo, si el Supremo acepta el recurso de Pasajes, la caza en Ulia quedaría en suspenso por el momento. “En ese caso, la Diputación de Gipúzcoa podría dictar una orden foral para autorizarla mientras no se pronuncien los tribunales”, explica el representante de los cazadores, que lamenta que el asunto haya terminado de este modo.

Según señala Zaldua, “nosotros mismos hemos ido reduciendo paulatinamente el número de puestos de caza de Ulia, en función de la evolución de la zona”. Asimismo, agrega que “si no se hubiera prohibido la caza en 2012, en estos momentos habría aún menos puestos de los que hay”. En la actualidad, hay unas 40 instalaciones desde las que se puede disparar con escopeta a las aves que pasan en Ulia.

Horarios

El representante de los cazadores de Gipúzcoa recalca que esta actividad solo se puede producir en Ulia desde los puestos, ya que los cazadores no tienen permitido transitar libremente por todas las áreas, por lo que descarta que sea una actividad peligrosa. Los fines de semana solo está permitida la práctica cinegética hasta las 10.00 de la mañana mientras que el resto de la semana puede llevarse a cabo a cualquier hora. “Hay que recordar que en Ulia solo se caza un mes al año, desde mediados de octubre hasta mediados de noviembre y hay unas normas muy estrictas respecto a las distancias de las casas, etc.”.

El debate sobre esta actividad se encuentra en los tribunales desde hace cinco años. Tras la prohibición foral del Gobierno de Bildu, los cazadores recurrieron por un defecto de forma y les dieron la razón. La siguiente orden foral fue recurrida de nuevo, por motivos de fondo, y de nuevo los cazadores ganaron en los tribunales ya que los jueces consideraron que estos puestos son tradicionales y están aceptados en la Ley Vasca de Caza, de rango superior a las normas forales.

Según la Federación, hay ahora unas 18.000 licencias para cazar en Gipúzcoa. De los permisos para cazar en Gipúzcoa, 4.000 corresponden a donostiarras.

Informa Carolina Alonso para noticiasdeguipuzkoa.com

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