Todo lo que debes saber si atropellas a un animal cinegético
El aumento de la población de algunas especies cinegéticas en nuestro país está provocando un aumento considerable de los accidentes de tráfico
Varios aspectos legales determinarán, según la situación, la responsabilidad de los daños producidos en el accidente
Redacción | 20.492 fueron los accidentes provocados por animales salvajes durante 2017 según datos de la DGT. En la actualidad las cifras siguen subiendo. La sobrepoblación de muchas especies cinegéticas, la expansión de las zonas de monte junto con la de las zonas urbanas están favoreciendo que las cifras, en cuanto a accidentes de tráfico provocados por animales, sigan creciendo cada año.
Las especies cinegéticas que más accidentes provocan son el corzo y el jabalí, siendo Castilla y León, Galicia, Cataluña y Aragón las provincias que más accidentes de este tipo sufren.
Claves para evitar accidentes
Con semejantes cifras, no resulta nada extraño que cualquiera pueda verse en una situación en la que un animal salvaje cruce la carretera delante de su coche, pero ¿qué debemos hacer entonces? Aquí te explicamos algunas claves:
Ser precavido puede evitar un accidente. Es importante estar atento en todo momento a la carretera, al entorno y a las señales de tráfico que nos aportan mucha información. Normalmente, las zonas peligrosas de una carretera por la posibilidad de que un animal salvaje se cruce suelen estar bien señalizadas. Además, reducir la velocidad de la marcha también ayuda a reaccionar si un animal decide cruzarse.
Evita los volantazos. En muchas ocasiones, los accidentes se producen por intentar esquivar a un animal y no por una colisión directa con este. Lo ideal es frenar lo máximo posible sin perder la dirección ni el control del coche. Si existe la posibilidad de esquivar al animal con seguridad siempre puede ser una buena opción.
¿Qué hacer ante un atropello?
Buscar un lugar seguro para detener el vehículo. A pesar de los nervios que se puedan sufrir tras el atropello de un animal debemos mantener la calma. Buscar un lugar seguro para detener el vehículo puede evitar un accidente mayor. Como dicta el código de circulación deberemos encender las luces de emergencia del coche o warning, poner los triángulos de seguridad y abandonar el vehículo provistos de nuestro chaleco reflectante para ser vistos por los demás usuarios de la carretera.
Avisar a las autoridades pertinentes. Lo primero que debemos hacer, si la seguridad lo permite y partiendo de que no haya habido daños personales, es comprobar el estado en el que se encuentra el animal. Debemos recordar que muchos animales heridos pueden llegar a ser agresivos por lo que debemos extremar las precauciones. Posteriormente, por tratarse de un animal cinegético, la responsabilidad de ocuparse de él es del Servicio de Protección de la Naturaleza da la Guardia Civil (Seprona), por lo que deberemos ponernos en contacto con ellos.
Es importante que el cuerpo del animal aparezca puesto que de ese modo los agentes de la Guardia Civil podrán realizar el atestado policial que nos proporcionará el parte que hará que nuestro seguro cubra los daños por el siniestro. Además, el cuerpo debe ser retirado de la carretera por la seguridad del resto de conductores.
En caso de no haber cuerpo del animal lo más probable es que el seguro no se haga cargo de los daños.
Conductores siempre responsables
La ley contempla que en un atropello de una animal cinegético «será responsable de los daños a personas o bienes el conductor del vehículo, sin que pueda reclamarse por el valor de los animales que irrumpan en aquellas».
Finalmente, el responsable de los perjuicios ocasionados en un accidente con un animal cinegético implicado es el titular de la vía si esta no posee una valla de cerramiento en condiciones, no se ha reparado en caso de existir y estar dañada, o no disponer de la señalización específica de animales sueltos en tramos con alta accidentabilidad por colisión de vehículos con los mismos.
Recientemente, en Galicia, apareció la polémica debido a la imposibilidad de poder abatir ciervas ni corzas en batidas durante la temporada 2019/20. Por este motivo, para la asociación de sociedades de caza, los cotos de caza quedarían eximidos de la responsabilidad de hacerse cargo de los accidentes de tráfico durante la celebración de batidas o monterías de caza mayor autorizadas y en las 12 horas posteriores, puesto que estas están consideradas acciones colectivas de caza.