SEGURIDAD CON LAS ARMAS POR FAVOR
Artículo cortesía de Pedro Pita.
Hola a todos: ha comenzado la temporada y ya tenemos que lamentar los primeros accidentes e imprudencias con las armas.
POR FAVOR TOMEMOSLO EN SERIO
Algunas recomendaciones que nos evitaran más de un disgusto.
EN LA MANIPULACION:
- El primero y más importante consejo para utilizar correctamente las armas es la prudencia.
- Tenemos que conocer el arma que tenemos en nuestras manos, sobre todo su funcionamiento y los elementos de seguridad.
- Sabemos que es obligatorio tener las armas rayadas (tipo E ) en un armero homologado.
- Si es posible en los rifles de cerrojo retiraremos este del arma y depositaremos en un sitio distinto.
- La munición no debe estar en el armero, sería conveniente tener un sitio seco y seguro para su depósito
Tendremos la precaución de examinarlas antes de guardarlas, siempre sin cargar y desmontadas, en lugar seco y seguro, limpias y engrasadas cuando no las utilicemos. (Por seguridad insisto en un Armero aunque sean del tipo D).
Trataremos con la máxima prudencia, todas las armas como si estuviesen cargadas.
Cuando entreguemos o recibamos un arma nos aseguraremos que está descargada.
Esa verificación la realizaremos apuntando hacia un lugar seguro y en espacio abierto.
Para evitar fallos y accidentes deberemos proceder a un cuidadoso mantenimiento de las armas.
Ocúpese de la limpieza de las armas después de la jornada de caza. Si es posible en una habitación a solas, nunca en presencia de niños (lo repiten todo). Es aconsejable pasar la baqueta con el alambre espiral por lo menos cuatro veces durante la temporada.
Verifique que las piezas fundamentales del arma no tienen holgura. Cuidado con los desgastes, roturas y desajustes, son peligrosos. Las armas antigüas necesitan mucha atención, seria conveniente que las revise un profesional.
Las armas oxidadas, o descuidadas, en su mantenimiento, estarán más expuestas a accidentes, que por lo general tienen consecuencias muy graves.
No estaremos en sitios públicos con las armas desenfundadas ni montadas, aunque sepamos que estén descargadas. Cuando estemos en grupo, las armas deberán estar descargadas, abiertas y apuntando hacia arriba. Deben transportarse descargadas y enfundadas (mejor en el maletero del vehículo) hasta el lugar donde serán empleadas.
Las armas estarán siempre bajo nuestro control directo.
Nunca dejaremos las armas dentro del coche si no lo tenemos controlado, aunque sepamos que estas no se ven y el coche este bien cerrado.
Una costumbre habitual, que jamás tenemos que hacer, es apoyar las armas en los vehículos, aunque estén descargadas, son superficies muy resbaladizas e inestables.
Y sobre todo, creo que no tenía ni que decirlo, jamás pero jamás apuntemos con un arma a nadie, aunque sepamos a ciencia cierta que esta descargada.