Permiten que un perro agonice durante horas por gestiones burocráticas

Un pastor alemán agonizaba ayer en la parroquia de Arcillá, en el municipio lucense de Cospeito, debido al disparo en el cuello que algún desaprensivo le propinó.

Los agentes de la Guardia Civil llamaron a la protectora de animales para que pasasen a recogerlo. La protectora avisó al Concello de Cospeito para que ordene el servicio de retirada, ya que la competencia de los animales es municipal.

En ese momento la protectora no había recibido la pertinente autorización, pero mientras, el animal agonizaba tirado al lado de una carretera local, vigilado por la Guardia Civil y varios vecinos.

En estos casos, dado que las competencias son municipales, es el ayuntamiento el que está obligado por ley a enviar a un veterinario para sacrificarlo y evitarle sufrimiento, o tomar la decisión que el profesional considere oportuna.

Finalmente, cuando por fin llegó la veterinaria el animal falleció, con lo que no fue necesario ningún sacrificio.

Fuente: lavozdegalicia.es