Manifiesto a favor de la caza con galgo

El presidente de la Federación Extemeña de caza, nos hace llegar un manifiesto en favor de la caza con galgo.  Cada año, al finalizar la veda, se reproducen insistentemente las mismas peticiones para acabar con la caza con galgo.

En su alegato, Don José María Gallardo expone el peligro que supondría para la especie la eliminacion de esta modalidad de caza.  Además, cuestiona a todos aquellos ignorantes que sin haber pisado el campo, se creen con derecho y autoridad moral para pedir el fin de la caza con galgo.

Reproducimos a continuación el texto integro porque nos parece muy interesante:

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Osada es la ignorancia, de aquellos que hablan y juzgan desde el mas completo desconocimiento, teniendo como telón de fondo unos prejuicios y complejos desmedidos en contra de todo lo que entraña la caza, sea cual sea su tipo o modalidad, sin tener en cuenta lo que la actividad entraña y los perjuicios y consecuencias de su prohibición.

Como hordas de soldados perfectamente comandados, en los últimos días y como consecuencia del cierre de la caza de libre con galgos, han salido a la palestra periodistas, comunicadores y ecologistas que no han pisado un terrón más allá de la “Casa de Campo”, pero que parecen comprender y entender mucho mejor que nosotros, lo que la caza, los cotos y la actividad cinegética en general entraña y además, se empeñan en enseñarnos lo que hay que hacer para cuidar la naturaleza, nuestros campos y las especies que lo habitan.

En esta ofensiva emprendida contra la los galgueros y la caza de liebre con galgos no se puede estar más equivocado, no se puede criminalizar a un colectivo que tanto amor y cariño derrocha con sus files compañeros de caza, galgueros que dedican horas y horas a pasear a sus perros y entrenarlos, cuestión que por otro lado es necesaria, el entrenamiento de un atleta se tiene que realizar a diario y lo necesita para tener una buena calidad de vida. Pero seguramente quien no quiere escuchar estos razonamientos dirá que los están maltratando, que los están obligando y seguro que prefieren tenerlos como perritos falderos, encerrados en un piso y sacándolos a pasear diez minutos al día. Los cazadores se preocupan de sus compañeros de caza, de sus lebreles y encargado por la Federación Andaluza de Caza, la Cátedra de Recursos Cinegéticos y Piscícolas de la Universidad de Córdoba, elaboró un estudio científico sobre el impacto del entrenamiento en los galgos, concluyendo que un entrenamiento diario favorecía el desarrollo de las cualidades de esta especie canina, que al igual que un atleta de primer nivel, necesita un entrenamiento diario para mantener sus estándares morfológicos y fisiológicos.

Querer prohibir la caza de la liebre con galgo, además de impensable, de ser una afrenta al sentido común, sería perjudicial para la propia raza canina, desapareciendo casi en su totalidad una de las especies más extendida en nuestra geografía. No siendo el perro preferido por el urbanita para habitar un piso y privándole de su principal finalidad, que es la carrera, ¿quién iba a tener un galgo?.  Desde el siglo II a. C., el que fue cónsul de la Bética romana, Arriano de Nicodemia, ya hacía referencia escrita al galgo y a la caza de liebres con este can. Desde entonces, el galgo, raza autóctona de España, ha sobrevivido a los tiempos, a las enfermedades y a las modas, mejorando su fenotipo y genotipo. Y si esto ha sido posible, desde luego que no ha sido gracias a quien hoy se erige defensor de los “pobres” galgos, sino gracias al esfuerzo, constancia, tesón y amor de miles y miles de galgueros de toda España.

Qué grosero me ha parecido siempre el generalizar, pero qué fácil es caer en esa trampa cuando a uno le conviene, y eso es precisamente lo que está pasando con los galgos, que por una panda de desalmados a los que no se les puede llamar cazadores, que asesinan a sus mascotas, a sus fieles compañeros y que enciman lo hacen exponiéndolo a la opinión pública -hay que ser masoquista, morboso y  despiadado- se está juzgando a todos los miles de galgueros que quieren y tratan perfectamente a sus lebreles. Igual que todos los hombre no son maltratadores, ni todos los políticos corruptos, ni todos los ecologistas charlatanes, no todos los galgueros son asesinos, sino que al igual que en todos estos casos, por suerte son una muy pequeña minoría. Contra esos pocos, que recaiga todo el peso de la justicia y se agraven las penas, para el resto, respeto, mucho respeto.

La Federación Extremeña de Caza

José Mª Gallardo Gil’

La noticia entera la puedes ver en el siguiente enlace: manifiesto a favor de la caza con galgo