El porqué de los accidentes de caza
La imprudencia es la posible causa del 95 por ciento de los siniestros registrados en las monterías.
El accidente registrado el pasado domingo en una montería en el término municipal de Córdoba, en la que resultó herida una persona por disparo de bala en un brazo, es algo que, por desgracia, no coge por sorpresa al sector. Organizadores de batidas y cazadores veteranos consultados por ABC coinciden al afirmar que tras el 95 por ciento de los accidentes registrados al cierre de cada temporada está la imprudencia del ser humano como única responsable. Los accidentes achacables a la mala fortuna, que aún cumpliéndose todas las normas de seguridad acaban en tragedia, son los que menos llenan las crónicas de sucesos.
El responsable de Cinegética Los Barrancos, una de las orgánicas más activas y consolidadas en la región, José Morillo-Velarde, señala que de seguirse a rajatabla todas las normas de seguridad y consejos que se dan a los cazadores antes de cada montería sería casi imposible lamentar daños. «Los problemas siempre vienen de aquellos cazadores que se mueven, que abandonan sus puestos», señala.
Mantener la distancia recomendada
Otra de las causas más comunes tras los accidentes, y que es lo primero que se les advierte a los participantes, y que deberían tener interiorizado como un mantra, es lo que se llama en el argot «no disparar a los visos», es decir, no tirar en llanos. «La bala tienen que acabar siempre enterrada», sentecia Morillo-Velarde.
No todas las imprudencias vienen de quien dispara. Los organizadores de monterías comerciales, en su afán de negocio, «siembran de puestos los montes», señala el responsable de Cinegética Los Barrancos, lo que supone un serio riesgo. «Nosotros mantenemos la distancia recomendada y hacemos que siempre haya contacto visual entre los puestos colindantes». Además, esta orgánica organiza los puestos de forma que sean accesibles desde vehículos. «Nuestros puestos están todos desbloqueados y si, por una emergencia, el cazador tuviera que abandonarlo durante la batida no se comprometería su seguridad».
Informa David Jurado para abc.es