Las indemnizaciones por accidentes caen en picado con la nueva norma
La Sociedad de Cazadores del Oriente de Asturias (Socoa) «La Llanisca» ha pasado de pagar los daños en unos cincuenta accidentes de tráfico anuales con animales cinegéticos implicados a dos en lo que va de año. Son datos facilitados por la junta directiva, ayer, durante la presentación de los tres nuevos coches que la sociedad ha adquirido a través del «renting» (alquiler) para que los usen los tres guardas que tiene contratados.
El descenso en los gastos que ocasionan estos siniestros se debe al cambio de normativa, pues mientras antes los cazadores pagaban siempre que había un accidente con animales cinegéticos implicados, ahora deben darse una serie de características, como que se produzca en día de cacería. El presidente de Socoa «La Llanisca», Bernardo Gutiérrez explicó que de tres casos que han tenido en lo que va de año en sólo dos han resultado inculpados. Gutiérrez desveló, además, que el borrador de los nuevos estatutos de la sociedad está prácticamente finalizado y se enviará a los socios para que puedan conocerlo antes de votarlo en una asamblea extraordinaria que prevén convocar en julio.
Este nuevo reglamento establecerá, entre otros aspectos, los requisitos para acceder al coto. El vicepresidente de la sociedad, José Elvira, explicó que en la actualidad hay unas cuarenta personas que han solicitado entrar. Entre ellas está la joven riosellana Sara Buenaga, quien lleva más de año y medio esperando por una respuesta justificada. Gutiérrez negó que exista machismo en este caso concreto y apuntó a la «saturación» que tiene el coto, «sobre todo en caza menor». El presidente descartó desvelar los requisitos de los nuevos estatutos antes de que los conozcan los socios, aunque afirmó que los nacidos en el concejo seguirán teniendo acceso directo. Socoa tiene 340 socios y un presupuesto de 173.000 euros, del que la mayor parte se invierte en pagar a los guardas. Francisco Alonso, Sonia Campillo y Juan Frade, los tres que trabajan en el coto llanisco, realizarán ahora su trabajo a bordo de los coches marca Dacia que la sociedad presentó ayer. Pagará por ellos una cuota de 200 euros mensuales y está previsto un gasto de 125 euros en gasolina, un total similar al que han invertido hasta ahora pero con vehículos nuevos, pues hasta la fecha los guardas se desplazaban en sus propios coches. El contrato de alquiler, con opción a compra, se firmó por cinco años.
Informa: lne.es