La hibridación entre lobos y perros que los científicos no saben cómo solucionar
La hibridación puede «afectar profundamente la composición genética, la supervivencia a largo plazo y la evolución de la especie».
La posibilidad de que la eliminación de híbridos abriese una «laguna legal para iniciar una matanza de lobos» frena la adopción de medidas.
Redacción | Según un estudio publicado en Frontiers in Ecology and Evolution, el acercamiento de los lobos salvajes a las poblaciones, junto al creciente número de perros asilvestrados, está produciendo que ambos se hibriden creando manadas de ejemplares híbridos de perro y lobo. Esto podría suponer un peligro para la identidad genética de los lobos de toda Europa.
Ante esta grave situación, un debate multidisciplinar entre científicos españoles y de otros países se ha abierto para tratar la manera de abordar y frenar la hibridación de ambas especies.
Una de las conclusiones que se extrajeron fue que la falta de acuerdo y compromiso entre las personalidades mejor situadas para afrontar el problema podría suponer un gran hándicap para poder abordar el problema y un obstáculo para los esfuerzos que se están realizando para que el problema se reduzca.
«Tenemos que abordar esta cuestión antes de que los híbridos de lobo y perro retrocruzen con los lobos hasta el punto de que las poblaciones de lobos se pierdan en enjambres híbridos, y la conservación de las poblaciones silvestres se vuelva inviable», dice Valerio Donfrancesco, del Centro de Ecología y Conservación de la Universidad de Exeter.
«En este documento argumentamos que el acuerdo científico es crucial para animar a los responsables de la toma de decisiones a actuar, y para concienciar a la sociedad en general sobre este tema de la conservación», añade Donfrancesco.
Fertilidad en híbridos, otro problema
La hibridación, según indica el estudio, puede «afectar profundamente la composición genética, la supervivencia a largo plazo y la evolución de la especie».
Se ha estudiado que esta hibridación puede afectar negativamente de dos maneras. Por un lado, los perros asilvestrados son bastante numerosos, lo que podría producir una tasa muy alta de hibridación en un plazo muy corto. Por otra parte se teme que se pierdan algunos de los rasgos genéticos esenciales en la naturaleza debido al aporte genético de los perros ya que estos los perdieron durante el proceso de la domesticación.
Otro de los puntos de vista compartidos en el estudio fue que los gobiernos deberían eliminar los híbridos de lobo y perro, más aún en las pequeñas poblaciones de lobos salvajes en recuperación con el fin de frenar en seco su hibridación y no propiciar un aumento de las manadas de estos animales.
Desacuerdo en cómo adoptar las medidas
Tras estas conclusiones surgieron diferencias relacionadas con la manera en la que se debían gestionar las poblaciones, tanto de híbridos como de perros salvajes, y si deberían mantenerse cautivos, esterilizarse, liberarse o matarse.
«Existen márgenes para desarrollar un mayor consenso entre los científicos si las nuevas investigaciones abordan cuestiones de actualidad como la eficacia y la viabilidad de las medidas de control y su aceptabilidad social», explica el coautor del estudio Paolo Ciucci.
Los perros asilvestrados son un problema
Los perros asilvestrados en nuestro país suponen un gran problema no solo por la posible hibridación con nuestros lobos sino por los ataques y daños que causan tanto a la fauna salvaje como a la doméstica.
En 2017, Fapas difundió un vídeo titulado «Así cazan los perros». En el vídeo no se ve cómo el perro atrapa al jabalí, pero el Fondo para la Protección de Animales Salvajes pretendía alertar del daño que ocasionan los perros asilvestrados tanto en el ganado como en los animales salvajes, dejando a la vista que el lobo, pese a lo que se pueda pensar, no es el causante de todas las muertes de ganado o de otros animales salvajes.