La caza no es para avergonzarse

Es curioso cómo reaccionan los extremistas radicales en todos los sectores sociales. Actúan con un patrón común de intolerancia y al igual que animaba el mismísimo Maquiavelo, el fin justifica sus medios. Hace algunos días se produjo una filtración a la prensa, con varias fotografías de los hijos del multimillonario empresario americano, Donald Trump, posando con algunos de los trofeos que habían cazado en un safari en África, en Zimbabwe más concretamente.

 

Como no podía ser de otra manera, las asociaciones radicales pro derechos de los animales, denunciaron las “sórdidas” andanzas de los Trump. Pero,… ¡sorpresa!, los hijos del magnate no solo no se disculparon por realizar una práctica legal, si no que respondieron que: (¡ojo!) no se avergonzaban de ser cazadores. Si, si QUE NO SE AVERGONZABAN DE SER CAZADORES. ¡¡¡Bravo, sublime, magnífico, amazing, maravilloso!!!

Esto ha servido para que la opinión pública se divida nuevamente. Estas fotos de Donald y Eric Trump, junto a un elefante y un búfalo que acababan de cazar, con la satisfacción propia de todo cazador, han hecho que por un lado aparezcan los que entienden su afición y por otro, los que por supuesto no la entienden y califican estas prácticas de ¡ilegales!, ya que según estos eruditos éticojurídicos, aparte de ser una barbarie, cazan ¡especies protegidas!

Jack Carone es portavoz de la asociación en Defensa de los Animales y por lo que se ve, acuso a los Trump de bárbaros, trogloditas, faltos de inteligencia y de usar el mundo como su campo de juegos particular. Ahora me pregunto yo, ¿qué tiene que ver una cosa con la otra? Por cierto acaba sus perlas “acusando a los hermanos de cazar también un cocodrilo, un kudu y un antílope.

Donald Trump Junior, decidió a través de Twitter contestar a las acusaciones y además de no sentir vergüenza por ser cazador, dijo que ser cazador no implica tener que disculparse. Además defendió la caza como vía de financiación y alimento para países necesitados. Por supuesto, una vez argumentado todo esto, afirmo que los animales cazados, no estaban en peligro de extinción.

Solo quiero añadir, que espero que todos tomemos ejemplo. La caza es natural, es un patrimonio de todos. Yo soy cazador y no siento vergüenza y si orgullo. He dicho.

amp;feature=player_embedded">Video de la cacería

Fuente de la noticia: Europapress