Julio mes de mejora de fincas y cotos de caza

En este mes de Julio en el que el campo se encuentra en un estado inactivo, ya que no va a tener lugar en él ninguna modificación significativa, puesto que los cultivos de cereal estarán cosechados o a punto de cosecharse y ya habrán eclosionado los primeros huevos de perdices y el resto lo hará en la primera quincena de este mes, se puede decir que, la suerte está echada.  Los esfuerzos en mejoras del hábitat y en evitar en lo posible los impactos de la agricultura los tenemos que haber realizado en meses anteriores.

 

En Julio nos tenemos que dedicar a “leer el campo”, con esto quiero referirme a censar las polladas de perdices, ver qué y cuantas parejas de las que teníamos controladas en la primavera han conseguido sacar los nidos adelante y cuáles no, y sobre estas últimas determinar las posibles causas que han provocado el fracaso de la puesta, para estudiar como poder evitarlo en el futuro.

A la vez que estudiamos el éxito o el fracaso de las especies cinegéticas de caza menor que son las que más nos interesan y las que tienen unas densidades poblacionales por debajo del óptimo en la mayoría de los cotos de la península, debemos de fijarnos también en  el éxito o fracaso reproductivo de los predadores oportunistas, entre los que se encuentran el zorro, los córvidos y los perros y gatos errantes.

De esta forma veremos si la presión que hemos hecho sobre su control en meses anteriores ha sido efectiva, si ha tenido repercusión final en la población, si lo hemos realizado en el momento del año adecuado, etc….; si observamos que el control poblacional de estas especies no ha sido el suficiente debemos continuar con este control durante este mes, en todas aquellas comunidades autónomas que se autorice, puesto que minorizar en lo posible la predación de los oportunistas en lo primeros días de vida de los pollos, lebratos o gazapos es un factor muy importante para obtener al final unos datos de reproducción exitosos.

Los mayores depredadores de pollos son especies protegidas como aguiluchos cenizos, águilas calzadas y en los primeros días de vida de pollos, lebratos o gazapos especies como la cigüeña o gaviotas entre otras, estas especies no pueden ser controladas puesto que están protegidas, por lo tanto es de especial importancia controlar las poblaciones de los predadores oportunistas sobre los cuales la Administración si nos permite su control poblacional, siempre de modo justificado y con métodos de control especificados en las autorizaciones.

Como veíamos con anterioridad en este mes nuestro punto de mira debe de estar puesto en el seguimiento de las polladas, gazapos, lebratos, etc..; para ello debemos de realizar una serie de censos. Los censos deben ser realizados siempre por la misma persona y en unas condiciones climatológicas optimas, no tendré las mismas observaciones en un día lluvioso que en un día soleado y esto puede repercutir sobre las conclusiones finales.

Podemos dividir los censos en dos tipos: andando y en coche, el número mínimo de repeticiones que debemos hacer para que los datos sean representativos han de ser tres repeticiones andando y tres en coche, aunque cinco es el número de repeticiones idóneo, para obtener datos más significativos. Lo ideal es la realización de los censos al amanecer o al atardecer que es cuando los animales están más activos, en el caso de los animales de caza menor comienzan su actividad y en los de caza mayor se retiran al encame, lo que facilita la observación de todos estos en estas franjas horarias.

Aunque si el número de censos que tenemos que hacer es muy elevado lo ideal sería hacer los censos en coche al amanecer o al atardecer y los censos andando el resto del día evitando las horas centrales del día, que es cuando los animales están más inactivos, sobre todo en esta época del año que es cuando el calor aprieta. En los censos andando el recorrido ideal será de unas dos horas de duración y una distancia de cinco kilómetros, para los censos en coche la duración será de dos horas y media aproximadamente y de veinte a veinticinco kilómetros.

Para la elección de la zona a censar debemos de elegir una zona representativa del coto, tanto para el censo andando como para el censo en coche, no obtendré valores que puedan extrapolarse al resto del coto si solo censo la zona con mayor densidad de animales o por el contrario la zona más pobre del coto, lo ideal es elegir una zona intermedia para así obtener datos representativos de todo el coto.

Con estos censos vamos a poder conocer cual ha sido el éxito reproductor ese año en el coto y cual ha sido su evolución. Lo normal es que de las primeras repeticiones de los censos a las últimas repeticiones las polladas se vean disminuidas en número, esto es como consecuencia de enfermedades en pollos, predación por aguiluchos cenizos, zorros, águilas calzadas, etc..;

Hay datos de estudios que dicen que el número de pollos que llegan a la apertura de la veda general por pareja de perdiz es de 2,5; teniendo en cuenta que una perdiz roja salvaje pone del orden de 9 a 18 huevos, podemos afirmar que el índice de supervivencia de los pollos de perdiz es realmente bajo.

En el caso del conejo la principal causa de que la reproducción no sea exitosa viene determinada por las enfermedades que padece el conejo junto con la elevada predación que sobre esta especie existe por parte de gran parte de los predadores.

En este mes de julio pueden aparecer los primeros brotes de mixomatosis, solo los conejos genéticamente más fuertes superaran esta enfermedad. Para evitar en lo posible los efectos de la mixomatosis en mi coto puedo llevar a cabo una serie de mejoras entre las que se encuentran:

  Magdalena Iturmendi Benedí

  (Directora Tecnica de Gecisos)

    www.gecisos.es