Europa gasta 30 millones de euros en pagar los daños causados por grandes carnívoros
Un nuevo estudio liderado por el CSIC revela que los ataques a ganado suponen el 68% del presupuesto de las indemnizaciones
Las zonas con especies reintroducidas destinan más cantidad de dinero a la prevención de ataques
Redacción | Un estudio liderado por la Estación Biológica de Doñana —que pertenece al CSIC—, en colaboración con el Instituto de Conservación de la Naturaleza de Polonia, ha concluido que los países de la Unión Europea destinan aproximadamente 30 millones de euros anuales para pagar daños provocados por grandes carnívoros.
El trabajo, realizado por 22 investigadores de las dos entidades, ha puesto en cuestión la política de prevención de daños producidos por estos carnívoros. El mayor porcentaje de estos daños se corresponden con ataques a ganado, algo que supone el 68% de las indemnizaciones.
La misma investigación ha sacado a la luz que Noruega es el país que más compensaciones paga, con un total de 12 millones de euros al año por los ataques contra renos y ovejas criados de manera extensiva.
Además, el estudio ha puesto de relieve las diferencias en ciertos aspectos entre países. Por ejemplo, teniendo en cuenta que Noruega cuenta con una población de 50 osos y paga 45.000 euros anuales en daños mientras que Croacia, con 1.000 osos, paga 9.000 euros. El estudio advierte de que esta diferencia de cifras se debe al ganado que pasta sin vigilancia.
Por otra parte, se ha descubierto que la mayor parte de partidas presupuestarias destinadas a la prevención de ataques destaca en zonas donde hay especies de depredadores reintroducidas, como el oso pardo en los pirineos franceses.
Carlos Bautista, investigador del Instituto de Conservación de la Naturaleza en Polonia y autor principal del estudio, destaca la importancia de que las autoridades hagan un mayor esfuerzo en readaptar las prácticas ganaderas para compatibilizarlas con la presencia de grandes carnívoros.
Además, el equipo de investigación destaca las medidas como el pago de los salarios de los pastores y el suministro de perros guardianes de ganado, entre otras medidas, para prevenir los ataques.
Asimismo, el trabajo afirma que no siempre el aumento de las poblaciones de estas especies se traduce en más ataques. Y ponen como ejemplo los bosques del centro y oeste de Polonia donde el lobo ha crecido exponencialmente y el Estado tan sólo paga 239 euros por indemnizaciones al año.
Por otro lado, destacan que sería más eficiente crear una base de datos a nivel europeo en la que se reflejasen «los costes y procedimientos de compensación y prevención de daños en Europa» y así poder optar a la creación de políticas más eficaces. «Si queremos fomentar la convivencia entre la gente y los grandes carnívoros, las autoridades deben trabajar regularmente en los aspectos sociales de este conflicto, que va mucho más allá del dinero», advierten.
Los daños del lobo
Durante el año 2017, sólo en Castilla y León —comunidad autónoma que alberga un mayor número de lobos— la Administración tuvo que pagar 296.470 euros en indemnizaciones por ataques del lobo a 1.080 cabezas de ganado.
La provincia más afectada fue Ávila, con un total de 310 expedientes resueltos por la Consejería de Medio Ambiente y 353 cabezas de ganado afectadas. El importe de las indemnizaciones ascendió a 153.647,50 euros.
En el mismo año, el Principado de Asturias, otra de las comunidades autónomas con mayor incidencia de ataques del cánido, se destinó una partida presupuestaria de más 100.000 euros en materia de prevención de ataques de oso y lobo.
Nuevos casos de daños por osos
Recientemente, en La Tejera y San Ciprián de Sanabria, en Zamora, se han registrado sendos casos de ataques de osos a colmenas. Lo sorprendente del último incidente es que se ha producido a escasos dos kilómetros del centro del municipio.
Tras sendos destrozos se ha terminado protegiendo las colmenas con pastores eléctricos que alejen a los plantígrados y se han colocado cámaras de fototrampeo para lograr captar las imágenes de los ejemplares que rondan la zona.