Entrevista a Ricardo Juárez
Tengo el placer de presentarles la entrevista realizada al Doctor Ricardo Juárez, un apasionado y experimentado cazador que nos acercará a sus comienzos y a sus opiniones.
-¿Cómo te iniciaste en la caza? Bueno me crié en Los Navalucillos, donde mi padre ejerció la medicina durante veinticinco años. A los pies de Los Montes de Toledo, cabecera de Robledo del Buey, Los Alares y Valdeazores. A unos treinta kilómetros, en línea recta de Sevilleja de la Jara, Anchuras de los Montes, Navas de Estena, Retuerta del Bullaque, Horcajo de los Montes, San Pablo, Cabañeros. ¿Nos os huele a monte? ¿Qué podría haber sido, tenista?
– ¿Qué modalidades de caza te gustan más? La montería y los ojeos de perdiz, sin lugar a dudas. Dos modalidades, que en su momento, eran inigualables y únicas en el mundo. El rececho, sobre todo si lo practicas tú solo, o con un buen guarda de reserva, es también maravilloso. En general no rechazo ninguna modalidad de caza y las respeto todas. Hasta coger pájaros con liga, que lo hacía de niño y me encantaba.
– ¿Consideras que la caza es un deporte? Jamás.
Cazador, según mi manera de entender, es el que vive de la caza, evidentemente cazando. Los demás somos aficionados, algunos tan experimentados que podrían ser cazadores de oficio. Deportistas nunca, ni tan siquiera desde el punto de vista de hacer ejercicio. Segando algarrobas también se hace ejercicio y no creo que la gente lo practicase por deporte.
La caza es conocimientos, destreza, pasión, ética, naturaleza, vida si queréis. Por deporte no se le quita la vida a un animal.
– ¿Qué opinas de las fincas cercadas? Pues que son consecuencia del derecho romano. El famoso “De res nulius”, cosa de nadie. El animal salvaje es libre, no pertenece a nadie y su dueño es el que lo caza. ¿Qué cosas verdad?
De ahí viene el tema, de que no respetamos la propiedad y la gente tiene derecho a cuidar de lo suyo. Son, en definitiva, un mal menor.
De todas maneras me gustaría hacer una consideración: Yo distingo entre finca cercada, aquella que al menos cuenta con dos manchas y las reses montunas pueden elegir, estar en una o en otra. Y cercón , en el que los animales no tienen más remedio que pasar por las posturas, sin posibilidad de librarse.
No creo que fuese responsable por nuestra parte, el inventar lo que ya lleva tantos años inventado. Y queramos o no, son parte principal y sin ellos no sería montería, los perros.
En esta forma de cazar, lo hacen todos los que en ella participan: dueños del terreno, guardas, los que conciertan la mancha, escopetas blancas, escopetas negras o cucones, perros, perreros, postores, cargueros y organizadores. A veces el mejor venao o cochino pasa por los coches, o por donde unas señoras están organizando el taco. Querer que todo lo que se cace, lo hagan los que han pagado el puesto, es no tener las ideas claras de lo que es una montería. Por supuesto, estamos hablando de cazar, es decir en abierto, lo que significa que los animales que ahí se encuentren son libres y pueden elegir sus querencias, correr o taparse y cuando uno se encuentra fuerte, hacer cara a los perros. En esas condiciones los perros tienen la obligación de, no solo defenderse, si no de agarrar y ay de ellos si no lo hacen.
Al final de la jornada, si es que hemos cobrado alguna res, porque cazar es posible que hayamos cazado sin tirar a nada, lo encontraremos en el sitio designado. Un cochino muerto a cuchillo, un venado que se ha ahogado en una charca, una gabata que en alocada carrera se encontró con los perros, varios más cobrados a ley por las escopetas y otros tantos que fueron encontrados de forma casual por cualquiera que participaba y amablemente se los cobró al “montero” que se terminaba dos tortillas, un bocata de jamón y tres botas de vino, mientras tiraba al blanco, por que el día había sido muy aburrido.
Por último me gustaría que hiciésemos un examen de conciencia: ¿cuántas rehalas participaron en vuestra última montería? ¿de dónde soltaron, como lo dieron y por donde volvieron? ¿cuales sobresalieron? ¿ reconocisteis algún perro y como cazó? ¿fuisteis antes y después a ver los perros a los camiones? ¿felicitasteis a algún perrero o dueño de rehala? o por el contrario ¿hicisteis alguna crítica a hechos que no os gustaron?
– ¿Qué opinas de doblar los puestos en las monterías? Creo que es un grave error, permitido por muchas organizaciones y por nosotros mismos. En principio por seguridad, es evidente que multiplicamos el riesgo de forma exponencial, por cada arma de más que se encuentre en el puesto. En segundo término, es que estamos timando a los compañeros de caza, fundamentalmente a los vecinos. Y en tercer lugar y para mí el más importante es que no jugamos el lance con el señorío debido. Un servidor de ametralladora y su compinche no es que sean lo más bonito en una montería.
A esto solo le veo una pega y se trata de cómo mantener la atención de un niño, sin tener un arma en las manos, durante todo un día de caza. Prometo que otro día os lo contaré.
– ¿Qué opinas del actual sistema de licencias? Creo que debería haber una licencia provincial, una regional (provincia donde uno vive y limítrofes) y nacional. El actual sistema es un desastre y además las comunidades pierden dinero.
Por supuesto creo que debería haber un examen serio. ¿Puede todo el mundo participar en un rally o conducir un formula uno? ¿hay más muertos en las carreras de coches o en la caza?
-¿Qué crees que deberían mejorar los organismos competentes con respecto a la caza? Para empezar, todos los organismos deberían estar gestionados por profesionales. El fin último siempre sería proteger la naturaleza, la caza y a los cazadores. Los parques nacionales, por ejemplo, no son así por su propia naturaleza. Desde hace siglos, el hombre ha labrado, podado, descorchado, cazado, etc. Los conocemos así por la mano del hombre. Si los dejamos a su aire muy probablemente no los conozcamos en unos años. Un robledal inmenso, un quejigal o un hayedo, necesitan de podas y otros cuidados. El cervuno se carga el monte si la densidad de reses es grande. El azor no vive sin conejos. Y el delegado del organismo pertinente, sin chupar del bote.
Los ecologistas sandía, verdes por fuera y rojos por dentro, son los que en estos momentos parten el bacalao.
-¿Cómo ves la caza en España? Manifiestamente mejorable.
Para no ser derrotistas, la verdad es que hay aspectos, en los que funciona muy bien. Pero podemos mejorar. Deberíamos cuidar la seguridad, por ahí nos pueden echar la pata. Deberíamos cuidar las formas y respetar mucho mas al animal, máxime cuando ya está cobrado. Deberíamos cuidar la naturaleza y disfrutar de ella cuando practicamos la caza, reconocer los arboles, las matas, los pájaros. En definitiva cuidar nuestra afición.
Tienen, en este aspecto, un papel fundamental las organizaciones de caza, autenticas escuelas, donde se puede aprender este noble arte, o por el contrario “no más que martingalas“.
-¿Qué piensas de los blog y en concreto de Cazaworld?
Pues que son una herramienta moderna de comunicación y como es normal los cazadores no podíamos quedarnos sin utilizar las nuevas tecnologías. Pueden ser muy útiles, pero los debemos utilizar bien.
A parte de esto, pues son muy entretenidos, yo lo paso fenomenal.
Con respecto a Cazaworld, que quieres que te diga, pues que es el mejor, que sois los mejores, sin lugar a dudas. Estáis haciendo un gran trabajo, felicidades.
Un abrazo y muchas sierras.