El safari de Juan Carlos I ayudó a proteger animales en Botsuana
Jeff Rann ha concedido una primera entrevista a una televisión en la que ha afirmado que la cacería sirvió de ayuda al país para proteger a los animales.
Redacción | Al rey emérito Juan Carlos I le salió algo más que caro aquel elefante y aquella rotura de cadera. El suceso levantó un revuelo social y político debido a la situación que atravesaba el país en aquellos momentos y el que fuera monarca de España durante casi 40 años pidió disculpas tras recibir el alta hospitalaria.
Don Juan Carlos, que siempre ha mostrado su pasión por la caza, se encontraba cazando en Botsuana en abril de 2012 cuando sufrió una caída. Lo inhóspito del lugar hizo que la evacuación de urgencia fuera costosa, pero 24 horas después de romperse la cadera el doctor Villamor estaba operándole. Se cuestionó socialmente que el rey emérito estuviera de caza en el país africano con la empresa Rann Safaris.
El safari ayudó al país
Seis años más tarde, TV3 ha conseguido entrevistar en exclusiva al propietario de la orgánica de caza, Jeff Rann. El hombre que acompañó a Juan Calos I no tiene dudas acerca de lo sucedido ni entiende el alboroto político que se levantó tras lo sucedido. «Teníamos una relación de cliente, amigo y cazador… lo que hizo fue totalmente legal. Fue una buena cacería, le gusta la naturaleza», ha explicado Rann.