El PP permitirá el aprovechamiento de especies invasoras
La proposición de ley persigue poder capturar sin problemas la trucha arcoiris, la carpa, el cangrejo rojo o el arruí.
Algunas de las especies incluidas en el catálogo de especies invasoras fueron introducidas por la propia Administración hace décadas.
Combatir las especies invasoras en España es una tarea sujeta a continuos vaivenes legales. Ahora, el grupo popular en el Congreso ha presentado una proposición de ley que pretende legitimar el uso o aprovechamiento de especies que venían siendo consideradas exóticas e invasoras y que, por lo tanto, en teoría, estaban condenadas a su exterminio. La modificación se promueve tras las exigencias planteadas por diversos sectores que las utilizan para la pesca o la caza deportiva, o le daban un uso comercial.
La iniciativa del PP (una modificación de la ley de Patrimonio Natural) persigue sortear los efectos causados por el fallo del Tribunal Supremo (de agosto del 2016) que ordenó la inclusión en el catálogo de especies invasoras, entre otras, de la trucha arco iris, la carpa común, el cangrejo rojo o el arruí –muflón del Atlas–, que habita en las sierras de Murcia. La voluntad es amnistiar a estas especies. Su inclusión en el catálogo “conlleva la prohibición genérica de su posesión, transporte, tráfico y comercio de ejemplares vivos o muertos, y de sus restos, incluyendo el comercio exterior”.
El grupo popular en el Congreso ha presentado una proposición de ley que pretende legitimar el uso o aprovechamiento de especies que venían siendo consideradas exóticas e invasoras
El fallo –que comporta la aplicación de planes para controlar y erradicar estas especies– provocó la reacción de la Federación Española de Pesca y de empresas explotadoras del cangrejo rojo americano de la zona del Bajo Guadalquivir, que invocaron los daños económicos ocasionados y acudieron a los partidos para cambiar esta situación. El PSOE y C’s también se han mostrado comprensivos con sus argumentos.
El PP abre la puerta a que, por “razones excepcionales” o de “imperiosa necesidad”, se pueda justificar la exclusión de algunos animales del catálogo. Además de esas especies, la Federación Española de Pesca lleva años litigando para que dejen de tener esta consideración el lucio, la perca americana ( black-bass) o el salvelino, usadas en la pesca deportiva y recreativa. Si fuera así, podrían seguir siendo pescadas sin los problemas actuales.
La proposición de ley establece que en las áreas del territorio que fueron ocupadas por especies invasoras antes del 2007 (fecha de aprobación de la ley de Patrimonio Natural) se “podrá utilizar las modalidades de caza y la pesca” para el control y erradicación de estos ejemplares. La queja de los ecologistas no se ha hecho esperar. “Esta previsión no tiene sentido, puesto que la prohibición de liberar especies invasoras es anterior a la ley. Y, además, no hay mapas que digan en qué zonas estaban estas especies antes del 2007”, dice Theo Oberhuber, de Ecologistas en Acción.
Combatir las especies invasoras en España es una tarea sujeta a continuos vaivenes legales
Agustí Albiol, portavoz de la Federación Española de Pesca, señala que las especies arriba citadas no pueden ser consideradas “invasoras”, puesto que en algunos casos fueron introducidas hace cientos de años en el medio natural (a veces, de la mano de la propia Administración estatal: el Icona), y ya “ocupan un nicho ecológico”. “No hay afectación ecológica; y si la hubo, fue hace años. Hoy es imposible ya erradicar estas especies”, dice Albiol antes de detallar los cuantiosas daños económicos causados por la sentencia.
Tras el fallo judicial, toda la actividad económica vinculada al cangrejo rojo fue declarada ilegal –no se podía comercializar-, lo cual causó una conmoción en Isla Mayor (Sevilla). “El 70% de este pueblo vive de la pesca y la transformación del cangrejo rojo americano”, dice Valentín Murillo, presidente de la Asociación de la Pesca y Acuicultura del entorno de Doñana. “Son 200.000 jornales de ocho horas al año lo que están en juego”, añade. El cangrejo rojo fue introducido en esta zona del Guadalquivir 1974 y se convirtió en voraz especie invasora. Ahora, una vez capturado, se mata, se transforma en alimento y se exporta. “Somos el tercer productor de cangrejo tras China y Estados Unidos, y el segundo exportador. El 95% de nuestra producción va fuera. La Junta andaluza debió improvisar una normativa más que discutible para legitimar esta actividad: “Somos agentes ambientales de control poblacional de cangrejo”, sostiene Murillo.
Ecologistas en Acción, WWF y SEO/BirdLife sostienen que el plan del PP “supone una cesión evidente ante las presiones de ciertos colectivos de cazadores y pescadores” y la juzgan “inaceptable”. Los ecologistas critican que desde que se aprobó el catálogo nacional de especies invasoras, en 2011, tan solo se han aprobado dos estrategias y piden al PSOE y C´S que no sean cómplices de esta trampa legal”, dice Oberhuber.
Informa lavanguardia.com