El Alano Español de montería resiste en Berrocaza

La feria abulense de rehaleros y monteros, Berrocaza, acogió la primera Concentración Nacional de Alano Español de Montería con la participación de 43 ejemplares. Los aficionados, monteros y criadores, acudieron en buen número a la convocatoria de la feria para la exhibición canina del sábado 14 S y escucharon una presentación de Carlos Contera impartida por  Luis Cesteros acerca de orígenes y características en la raza de agarre tradicional de la montería española, cuyo colofón fue un animado coloquio con la presencia de decenas aficionados.

La quinta edición de Berrocaza, en Santa María del Berrocal, echó a andar el sábado 14 de septiembre, en una jornada calurosa, con el principal atractivo de la Concentración Nacional de Alano Español de Montería, una actividad pionera en España, que reunió a 43 ejemplares procedentes de distintas regiones, de muy buena calidad, superando las expectativas de la organización, que esperaban rondar la treintena de participantes. La concentración contó con la presencia de Carlos Contera, recuperador de la raza, y estuvo coordinada por Luis Cesteros, que ofrecieron una conferencia por la tarde en la que dieron a conocer todos los detalles y objetivos de selección de esta antigua raza española. Un buen número de aficionados participaron el coloquio posterior que recogió inquietudes y proyectos.

De entre las ferias de caza de nuestro país, Berrocaza, en Santa María del Berrocal (provincia de Avila) pasa por ser la más especializada en el mundo de la rehala, al que dedica toda la jornada del domingo. su día fuerte en público asistente. Realmente, Berrocaza es una feria dedicada a los perros de caza. Este año celebraba su quinta edición, como es habitual el tercer fin de semana de septiembre.

El cartel de Berrocaza contó con las imágenes de los ejemplares premiados en el concurso de 2012, como la mejor collera de podencos, la mejor collera de cruzados y el mejor ejemplar de la feria. El domingo tuvo lugar la gran concentración de rehalas, que sin duda es el momento cumbre de la feria. Se celebraron concursos de diversas categorías: rehalas, podencos andaluces y manetos, muestra, madriguera, rastro… Además otorgan premios a los mejores ejemplares de la feria. Cabe destacar que en las últimas dos ediciones se ha rondado la cifra de 1.500 canes tan sólo en este punto del programa.

En esta edición estuvo presente la célebre rehala del Marqués de Valdueza, con los perreros y el propio Marqués, divisa azul y gris, haciendo gala de sus perros conjuntados ya como una raza moderna, que espera su reconocimiento oficial. La Federación de Caza de Castilla y León apoya la feria cada año a través de su Delegación de Ávila. Gracias a ella los visitantes de Berrocaza pueden participar en actividades paralelas como galerías de Recorridos de Caza, galerías de tiro al vuelo con arco y cancha de compak-sporting, que gozan de una participación muy alta por parte del público aficionado.

También se encargan de la exhibición de perros de muestra con pruebas de campo y obediencia civil no básica, y de paloma a brazo. En declaraciones a la prensa, el presidente de la federación castellanoleonesa Santiago Iturmendi explicaba los factores que han contribuido al éxito de publico de la feria: «elevada calidad y cantidad de los ejemplares que se presentan, el entorno natural en el que se desarrolla y la familiaridad con que la viven todos los visitantes y participantes».

Tres razones

En esta edición se anunció con antelación de semanas y en el programa de la feria la Concentración Nacional de Alano Español de Montería y la nota de prensa rezaba así: “ en esta ocasión se ha apostado por los alanos, de la mano nada menos que del recuperador de la raza, Carlos Contera, quien estará presente en la feria berrocalense. La concentración estará coordinada por Luis Cesteros”.

La feria Berrocaza se caracteriza por reservar en cada edición un espacio a las razas autóctonas propias de nuestro país. Así, han celebrado concursos y exposiciones morfológicas de galgo español y pachón navarro. Nosotros aceptamos el desafío de convocar a los aficionados al Alano Español interesados por resistir en la crianza de la raza para su actividad tradicional de la raza: la Montería, expresión más elevada de la caza mayor en España.

Son tres razones de peso las que nos incitaron a la convocatoria. En primer lugar, la presión iconográfica que ejercen sobre la imagen de los ejemplares de la raza las exposiciones de la Real Sociedad Canina de España, que ha llevado al público y a los aficionados a una malinterpretación y modificación de su patrón racial, con ejemplares prognáticos, perfil chato, linfáticos y pesados. Distorsion completa del verdadero perro Alano.

En segundo lugar, una fuerte desviación en los criterios de selección de tipo y carácter, lejos de su original selección para la montería y caza mayor. La tendencia denunciada de cría anti-caza orientada a la sociedad urbana, destinada a propietarios no rurales, ni ganaderos, ni monteros, encajonando la secular raza de caza mayor con esa falsa idea de ‘perro de familia’ con lo que supone de suprimir en los programas de selección características morfología, carácter y aptitudes esenciales en la raza. El tercer motivo de nuestra presencia en Berrocaza lo constituye el riesgo ya evidente en el extranjero y en España de un uso deleznable e indeseable del Alano en funciones que le son impropias para guarda y defensa personal.

Con nuestro llamamiento de Berrocaza, una feria de caza por cazadores y para cazadores de principio a fin, queremos reivindicar el uso para la montería y la ronda de la raza de Alanos Españoles. Y remarcar durante la exhibición y el desfile de las diferentes edades el fin de utilización y los criterios tradicionales de selección. Los asistentes a la feria, propietarios y criadores, lo fueron por invitación y aunque bastantes de los invitados no llegaron a asistir por distancia u ocupación –andaluces, extremeños, gallegos-, cubrimos con brillantez el objetivo de un número representativo de ejemplares. Acudieron perros seleccionados y utilizados para la montería de las regiones colindantes: Madrid, Extremadura, Castilla-león, Castilla-La mancha. Hasta 43 inscripciones, más de veinticinco propietarios. Todos ellos vinieron a demostrar un nivel cohesionado en calidad y tipo de los ejemplares.

Raza en movimiento

Las diferentes clases ofrecieron un espectáculo de homogeneidad en estática y armonía en los movimientos, con resistencia y buen tranco. Los asistentes pudieron comprobar el seguimiento –uno por uno- al ajuste dentario, indispensable para machos y hembras en una raza cuya misión más importante es el agarre. Hicimos remarcar por la megafonía y a los propios aficionados el tipo tradicional, de perro atlético, ligero y veloz, que llega pronto al agarre porque está cerca de los buscas, con codicia en la caza, de fuerte tenaza y duradera presa, de labios secos que permiten la respiración lateral y la fijeza en la mordida.

Como juez valorador de la concentración puedo decir que llegando los perros a las jaulas ya nos apercibimos de un buen nivel de tipo y calidad. Dividimos a los asistentes en clases por edades. Los cachorros de menos de un año, juntos; los jóvenes de menos de dos años por sexos; machos y hembras adultos como clase abierta. Desde luego la más esperanzadora fue la clase abierta hembras, con magnificas perras, muchas de ellas ejemplares sobresalientes. Me atreví  a seleccionar cuatro de ellas como destacadas, por su feminidad, tamaño, expresión y movimiento, que lo tenían todo. Especialmente correspondían a una fuerte tipicidad racial.

La clase de machos adultos dos años en adelante fue bien divertida porque juzgamos a los ejemplares a la alemana, como se hace en aquel país con perros de la clase trabajo. Hicimos desfilar a los perros en círculo y al paso, pero luego monteros y perros se sometieron a un test de paso ligero que resulta esclarecedor en una raza que trabaja al galope. Los machos en estación ofrecían un escenario bello por homogéneo.

Tallas en el entorno de 60 cm. Excelentes bocas en el noventa por ciento del grupo con encajes dentarios perfectos en incisivos y caninos, las llamadas ‘llaves’. Bien de tipicidad en casi todos los perros, algunos muy contados ejemplares volcados a pesado, más belfos, menos fuelle. Creo que el cuadrilátero permitía una sesión de quince minutos en trote largo, mejor galope. Algunos perros terminaron por tirar los codos y otros a desencajar corvejones, otros hacían pensar en el fantasma de la displasia que ha llegado a la raza con cruces indeseables.

Personalmente, viví aquellos momentos soñando con un ring donde todos los machos trajeran bajo el brazo su certificado de libre de displasia, aunque de momento es inalcanzable para una raza poco organizada, donde tampoco en estos años las asociaciones -moribundas hoy- no han pensado nunca en el mañana. Lo que sí pudimos certificar allí mismo es que la mayor parte de los presentes ejemplares estaba libre de prognatismo, que fue cláusula de descarte para algunos buenos perros. El resultado fue una pista de honor central con cuatro hembras y cinco machos modélicos, de buen comportamiento en movimiento y excelente presencia en tipicidad y morfología, donde solo a un ejemplar macho le consentimos la mordida milímetros desajustada por mor de su imponente expresión. Es nuestro deber destacar en esta crónica la composición de los premiados excelentes (el orden no significa prioridad):

 

Hembras adultas

Machos adultos

Angel Martín

Nela, 2 años

José Luis Vicente

Curro, 4 años y Tango 2 años

Antonio Artero

Jadilla de la Guadaña, 3

Carlos García Dominguez

Brujo, 3

C. Contera & L. Cesteros

Alajú Atena, 4

Oscar Navarro

Jabato de Huebra, 3,5

Luis Vicente

Elsa, 2

Victor Pascual

Tigre, 2,5

SOS prognatismo

El prognatismo y la displasia son defectos de perros enfermos. Un perro de caza necesita estar exento de ambas degeneraciones. Durante el proceso de conservación de la raza y recuperación de lineas que se prolongó de 1980 a 1994, el objetivo de quienes planificamos y realizamos la operación –Luis A. Centenera y Carlos Contera– siempre fue la salvaguarda del perro Alano de montería, heredero de los perros monteros de la aristocracia cinegética española.

Una raza de agarre para la caza mayor, tipo atlético, con codicia, velocidad de intervención, insensible al dolor, bocas impecables, presa firme y coraje extremo. Los ejemplares de partida –cinco reproductores iniciales- todos ellos fueron libres de cualquier clase de prognatismo. Un perro de agarre prognático es como un soldado sin arma, porque en plena batalla puede perder la boca y la vida en el lance… o el oficio en los días posteriores.

El prognatismo se ha colado en el Alano por la confusión ulterior de ciertos criadores respecto al perro de presa de las Encartaciones, reintroducido  en el proceso de multiplicación del tipo. Y por las cruzas indeseables con Boxer y otros cruzados, que además han inoculado el nefando defecto de la displasia de cadera. Al desafío de su depuración y selección nos enfrentamos desde hace años, en la perrera y en las revistas. Ahora también en las webs.

Para quienes acudimos a Berrocaza se ha acabado el repertorio de los eufemismos a la italiana que algunos repiten como falsa cantinela: ‘tijera invertida’ para justificar el prognatismo de perros que pierden la boca enseguida; ‘perro de familia’ para justificar la falta de genio, coraje y codicia; ‘perros más desarrollados’ para justificar el cruce grandón; cabezas ‘imponentes’ para disimular los perros linfáticos, torpes, babosos y bastos que no están hechos para el campo y cuando llegan a la dehesa, por equivoco, no abandonan al perrero, que parecen idolatrar sus zahones.

Una de nuestras satisfacciones del fin de semana se produjo al día siguiente en las colleras de perros de agarre. Berrocaza reserva para el domingo los premios a los rehaleros participantes. Los miembros de la asociación ARRECAL de rehalas organizan las diferentes clases, juzgadas por don Felipe Vegue, un entusiasta perpetuo de la caza mayor y los perros de montería.

A la sección de perros de agarre, juicio por colleras, Felipe –ataviado a lo tradicional- me invitó a opinar durante el acto, detalle de montero maestro que agradezco y le honra. El juez movió a los participantes con ritmo. Algunos perros demasiado pesados no aguantaban el paseo, aunque no restó brillantez a los mejores.

Lo más interesante de aquella reunión de excelentes perros de presa acollarados por pares -de cualquier raza o cruce- estuvo en el desparpajo del juez, cuando decidió apartar las colleras de perros prognáticos explicando uno por uno a los participantes lo indeseable del prognatismo en la rehala y el motivo de descarte. Luego se centró en la función del perro de agarre, el valor y la armonía de las colleras seleccionadas.

Fue una lección de modos y de método al servicio de la selección que se destila de la experiencia, el uso y el oficio. El SOS prognatismo en el Alano Español no es un tema académico. Felipe Vegue demostró con su dictamen que es un capítulo de supervivencia en el monte.

Renovados objetivos de selección

Comenzar con buen humor fue uno de los objetivos del día. Y lo conseguimos prolongar hasta el final de la jornada. Tiene mucho mérito hablar en público en España, especialmente  sobre temas tan apasionados como los perros autóctonos. Luis Cesteros se esforzó en hacernos entender a todos los presentes en su charla cómo la teoría Valdueza del origen del alano en España justifica su origen y por tanto explica su conformación y sus aplicaciones tradicionales.

Orígenes y características en la raza de agarre tradicional de la montería española, cuyo colofón fue un animado coloquio con la presencia de decenas aficionados. En la presentación se vieron por primera vez nuevos hallazgos de escultura y pintura que testimonian una y mil veces el tipo tradicional de Alano español, libre de esas taras de nuevo cuño. Y lo que es más importante, la iconografía histórica de la raza se correspondió con los perros presentes horas antes en la pista de exhibición.

La respuesta de los aficionados ha sido buena, en cantidad y calidad. Albergamos la idea de una segunda reunión de aficionados y nos espera el reto de poder juntar nuevamente perros funcionales de nivel. Aparte nuestra condición de organizadores de esta primera Concentración, cabe reflexionar en clave colectiva sobre algunos hechos constatables en el momento actual de la raza, a modo de conclusiones, o quizá como punto de partida para un nuevo escenario:

El todo el equipo de Berrocaza se supera edición tras edición. Los hermanos González, ARRECAL, Ester y Sonia se han esforzado muchísimo para que el alano español reuniese un buen nivel expositivo y didáctico en la feria. Desde aquí, nuestro colectivo agradecimiento.

Esta crónica se la agradecemos a Carlos Contera y Luis Cesteros, criadores de Alanos de la marca Alajú.

Las fotos son cortesía de Lesstrange para Berrocaza

Los cinco machos de clase abierta (dos años en adelante) destacados en el centro de la Concentración Nacional de Alano Español de Montería. Foto Berrocaza.


Hembras adultas destacadas en la valoración de Carlos Contera (dos años en adelante). Concentración Nacional de Alano Español de Montería. Foto Berrocaza.

 

El equipo organizador de la Concentración Nacional de Alano Español de Montería: Rubén González, Carlos Contera y Luis Cesteros. Foto Berrocaza.