Cazadores y aeromodelistas de Ceuta se disputan el uso de una parcela

Una parcela mantiene en disputa a la Asociación de Aeromodelismo de Ceuta contra la Sociedad de Cazadores local. Las diferencias comenzaron en 2015, cuando los cazadores vallaron un terreno que el ayuntamiento les cedió para instalar una granja para criar perdiz moruna. El presidente de la sociedad de caza, Antonio López, afirma que han ofrecido todas las facilidades a los aeromodelistas para que accedan a la parcela y disfruten de su afición, pero dice que estos quieren un tercio del terreno y «volver a utilizar lo que usaban antes de manera ilegal».

Después de que en el pleno de la Asamblea se tratara la polémica existente entre la Sociedad de Cazadores de Ceuta y la Asociación de Aeromodelismo por una finca en García Aldave, desde la primera lamentaron ayer el salto a la palestra política de un asunto ajeno a este ámbito. Ajeno en tanto a que la discrepancia existente concierne a un terreno privado y que ambas entidades comparten actualmente.

Las desavenencias comenzaron en 2015 a causa de la valla que los cazadores pusieron en el terreno que la Ciudad les cedió con la intención de implantar una granja para la cría de perdiz moruna. Desde entonces comenzaron las discrepancias por el uso de esta parcela, contigua a otra privada donde los aeromodelistas acuden para disfrutar de su afición.

El presidente de la Sociedad de Cazadores de Ceuta, Antonio López Márquez, explica que el terreno en el que quieren poner la granja cinegética fue cedido por la Ciudad. Sin embargo, el terreno de la polémica es una parcela anexa, de propiedad privada y que tienen ‘alquilada’ las dos entidades. El problema, según explica López, es que los aeromodelistas para acceder a la parcela tienen que pasar por un estrecho camino, cuando «se les ofreció», afirma, entrar en la parcela de la asociación de cazadores, dejar incluso sus vehículos aparcados allí, y disfrutar de su afición sin problemas. Una opción que algunos de los socios aeromodelistas ha utilizado, asegura el presidente de los amantes de la caza.

Primera negociación fallida

«Nosotros en todo momento hemos sido los que hemos querido llegar a un acuerdo para molestar lo mínimo, aún habiendo un dictamen que dice que es incompatible ambas actividades en el terreno, pero nosotros no teníamos ni tenemos ningún inconveniente», afirma López Márquez. Recuerda así la primera negociación fallida con los aeromodelistas a quienes ofrecieron prácticamente acceder a todas sus peticiones, como la retirada de una valla abatible, el traslado de varios estandartes, entre otras peticiones. Sin embargo, «a través de un socio entregaron dos fotocopias en blanco y negro y con subrayador y querían un tercio de la parcela. Vamos que para entrar nosotros aquí teníamos que pedirles permiso a ellos», recuerda el presidente de la Sociedad de Cazadores.

El hecho de que esta polémica fuera tratada en el pleno de la Asamblea no ha sido del agrado de López Márquez porque no viene a ayudar a acercar posturas, afirma. Y de hecho, entre ambas entidades hubo buena sintonía: «Con el anterior presidente llegamos a un acuerdo y estábamos todos en buena sintonía. Lo que pasa es que hay algunos de ellos y miembros de su directiva que se han encerrado en que no, en que quieren volver a utilizar lo que usaban antes de manera ilegal durante muchos años».

Ciertamente, López Márquez se refiere a la carencia de una licencia para que los aeromodelistas vuelen allí sus aparatos. Hasta la llegada de los cazadores no había más obstáculo que la propia naturaleza, pero ahora la intención de instalar allí una granja para la cría de la perdiz moruna ha provocado al polémica.

La perdiz moruna más pura

Para los cazadores ceutíes, la crianza de la perdiz moruna no solamente se hace por mero interés de la asociación sino también para contribuir a la recuperación de la fauna local y su ecosistema. Están a la espera de los permisos correspondientes y por supuesto, señala el presidente, se ha buscado otros terrenos alternativos para la cría, pero ese es el lugar adecuado según los estudios realizados por la Universidad de Castilla y León y la de Lérida. Explica que en ese lugar, se dan las condiciones óptimas para la cría de la perdiz moruna de la que Ceuta puede presumir de tener la especie con la genética más pura, reconocida y certificada.

López Márquez explica que sólo existe esta perdiz en Canarias y Gibraltar, pero la más pura es la de Ceuta. Además, su crianza no solamente es por interés para los amantes de la caza sino que también contribuyen a mantener el ecosistema natural de nuestra ciudad.  Así las cosas parece que las diferencias seguirán siendo irreconciliables entre cazadores y aeromodelistas.

Informa Silvia Perdiguero para elfarodeceuta.es