Lo que deberías saber antes de ser cazador

20 junio, 2012 • Información de interés

Ayer por la tarde acudí a la cita que tenía con un «viejo» amigo, aunque jovén de edad, para ponernos al día. Había estado trabajando fuera de España y acababa de regresar.

Tras los abrazos, anécdotas, historias de sus aventuras profesionales en el extranjero, de pronto me comenta algo que me pilló desprevenido y era, que tenía especial interés en hacerse cazador. Sabiendo él de mi afición, me contó que durante su estancia al otro lado del charco, pudo compartir por primera vez en su vida, con compañeros de trabajo alguna jornada cinegética y la verdad es que me reconoció que la caza le engancho. Yo, claro, le miraba con esa cara de cazador curtido, que viene a decir: «hijo mío, te ha entrado el veneno y creo que ahora no te lo saca nadie» y le dije a él, que se podía afirmar que a partir de ahora, dejar la caza le iba a resultar complicado.

Tras comentarme en que consistieron sus jornadas cinegéticas en el extranjero, le convidé a que me contará que es lo que más le podía atraer de la caza en España y el sin ninguna duda me dijo muy seguro que la caza en mano y la caza del jabalí. «Bien» , me dije, vamos bien.

Seguimos hablando de la caza y me pidió que le le aconsejase como hacer  todos los tramites de permisos de armas, comos sacarse licencias de caza, seguro de caza, … Yo por supuesto me sentía como un verdadero «cicerone», contándole que hacer, como hacerlo, dándole consejos, hablando de que si le gustaría tener un perro de caza, de que si iba de montería, antes por supuesto me consultase, y todo lo que al cazador le gusta decirle a un nuevo aficionado a la caza.

El tiempo pasó volando y casi al final de la cita, me dijo lo que más me impresiono. Juanjo -espetó- sabes lo que toda persona debería saber antes de ser cazador, y yo le miré y le dije: «dime, que es lo que debería saber». «Pues simplemente -me dijo- parafraseando a Ortega y Gasset, que la caza es todo lo que se hace antes y después de la muerte del animal. La muerte es imprescindible para que exista la cacería«. Solo le pude dar un abrazo y decirle hasta la vista. Me dejó sorprendido, pero para bien.

A buen entendedor pocas palabras bastan. No tenía ni el permiso de armas y acababa de estar un par de horas con un cazador, con un buen cazador. Así da gusto. #yosoycazador


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *