Aparición de un nuevo parásito en los corzos

Detectada por primera vez Hypoderma actaeon, una miasis emergente en los corzos españoles.

corzo

Imagen: Juan Lacruz

Enmarcado dentro del Convenio de Colaboración que la Asociación del Corzo Español tiene suscrito con el INVESAGA de la Universidad de Santiago de Compostela para el seguimiento sanitario de los corzos españoles, a principios de este año se detectaba un nuevo parásito en animales procedentes de la España Central. Tras un estudio pormenorizado de las muestras tomadas por colaboradores de la ACE, se ha determinado que se trata de Hypoderma actaeon, una larva subcutánea de un díptero Oéstrido, que provoca intensas reacciones hemorrágicas bajo la piel de los corzos infectados. Además de los posibles efectos adversos que, en combinación con otras parasitosis, pueden provocar en la demografía de la especie, la peculiaridad de esta nueva afección detectada, es que H. actaeon, hasta la fecha sólo estaba descrita en ciervo (Cervus elaphus) y, esporádicamente, en gamo (Dama dama). Probablemente, una inadecuada gestión que está permitiendo altas densidades de ciervos en la España central, ha favorecido la presencia de este parásito en el medio natural, y su traspaso, ahora, a las poblaciones de corzo produciéndose esta infección cruzada.

A diferencia del oéstrido Cephenemyia stimulator, ya presente en los corzos españoles desde hace más de una década, el ciclo de “la mosca de los barros” es sensiblemente diferente en cuanto a la época del año en el que podemos detectar las larvas. La mosca de Hypoderma vuela durante el verano, depositando los huevos sobre el pelo del corzo. Las larvas recién nacidas penetran a través de la piel y, tras una primera muda, realizan un orificio cutáneo por el cual respiran. El mayor grado de infestación corresponde al período otoño-invernal, momento más adecuado para detectar los gusanos bajo la piel de los animales infectados.

Ante la aparición de este nuevo parásito, la Asociación del Corzo Español, en colaboración con el INVESAGA, está trabajando para conocer el alcance real del proceso y poder tomar las medidas adecuadas de gestión encaminadas a minimizar su influencia. Así mismo, dentro del “Proyecto Oéstridos”, la ACE demanda la colaboración de todos los cazadores para la detección de estos parásitos y su caracterización geográfica, poniendo a disposición de todos los interesados unas fichas en su página web (www.corzo.info) que ayuden a completar el alcance de esta nueva enfermedad parasitaria.

Asociación del Corzo Español