Alano

Perro de presa, el alano se considera una raza autóctona española. Lejos de lo que la leyenda negra dice, tiende a ser un perro tranquilo, noble, fiel, valiente y seguro. Físicamente es ligero y buen corredor, pero no olvidemos que estamos hablando de un moloso, por lo que, cuando se usaban de pastores, eran idóneos para conducir grandes reses semibravas o para defender los rebaños; y cuando se emplea en la actividad cinegética se usa en la caza mayor, como perro de diente para ciervos o jabalíes.

De hecho, a finales del S XIX se prohibió la actividad llamada “perros al toro”, de forma que el alano se ha quedado como animal de compañía –en pocos casos-, pastor y, sobre todo, cazador.