Adecana rechaza generalizaciones para regular la temporada de caza en Navarra

Informa Adecana | El pasado lunes día 29 de mayo, la Administracion foral convocó a la Comisión Asesora de Caza, órgano consultivo formado por los representantes de zonas de las sociedades locales de las distintas zonas que componen Navarra Adecana y la FNC, para tratar la propuesta de la Orden Foral de Vedas para la temporada 2017-2018, pasando a continuación al Consejo Navarro de Medio Ambiente, donde le dieron el visto bueno de forma mayoritaria con 8 votos a favor, 2 en contra y 3 abstenciones.

El borrador de la Orden de Vedas que pasó a consulta establece la normativa específica que regirá la caza en Navarra para la temporada 2017-2018, y como lleva muchos años depurándose tiene básicamente un carácter continuista en cuanto a especies y fechas de comienzo y fin de los periodos de caza, si bien este año ha habido un par de temas que han sido objeto de modificación que posteriormente pasaremos a comentar.

En cuanto a los períodos de caza, se fija, con carácter general, del 15 de agosto de 2017 al 25 de febrero de 2018, sin perjuicio de otras actividades cinegéticas contenidas en los Planes de Ordenación Cinegética, como es el caso de los recechos de macho de corzo que tiene lugar desde el 1 de abril al 31 de julio.

Las novedades a destacar que se trataron fueron las siguientes:

Jabalí

Se continúan con las fechas habituales de apertura y cierre, proponiéndose que comience el 2 de septiembre de 2017 hasta el 25 de febrero de 2018, los jueves, sábados, domingos y festivos, siendo novedad que en las esperas nocturnas que se concedan, por seguridad se autorizará la iluminación con linternas acopladas al arma o focos, exclusivamente en los instantes previos al disparo o suelta de la flecha.

Ciervo

Se propuso que la caza en batida de los ciervos en vez de acabar a finales de febrero, esta finalice el 28 de enero de 2018 al estar las hembras en avanzado estado de gestación.

Limitación de los días de perdiz y liebre

Como novedad, de manera general y debido al estado de sus poblaciones, la Administracion foral propuso limitar a un máximo de dos días de caza por coto, siendo el horario máximo hasta las 14 horas, indicando que de manera excepcional y justificada, se podría ampliarse esta limitación general hasta un máximo de cuatro días, en aquellos cotos que, teniendo poblaciones suficientes, reúnan los siguientes requisitos: Acreditar haber trabajado en los últimos años en medidas eficaces de mejora del hábitat de perdiz, entendiendo como tales, las bandas sin cosechar o sin cultivar, las siembras y/o los desbroces destinados a la mejora de esta especie; Acreditar haber trabajado activamente en el control de depredadores y haber presentado en los últimos años unos calendarios de caza adecuados a las poblaciones naturales disponibles en dicho acotado.

Esa justificación se proponía que debería acompañarse en la entrega de los datos de capturas de la temporada anterior y propuesta de calendarios, no pudiéndose acoger en ningún caso a esta medida aquellos cotos en los que se detecte la suelta de perdices de granja genéticamente híbridas.

Ante ello los representantes de los cazadores no estuvieron de acuerdo en limitar de forma genérica a todos los cotos los día de caza de perdiz, argumentando para ello que hay una serie de sociedades locales de Cazadores que gracias al trabajo realizado en sus conteos les da para cazar más días, solicitando que se hiciera constar que aquellos cotos que en su Plan de Ordenación Cinegética tengan los ejemplares necesarios puedan cazar más días.

Desde Adecana indicamos que no se puede tratar por igual a los que tengan menos perdices y los que a base de trabajo y trabajo han conseguido con gran esfuerzo mejorar sus poblaciones. Los POC nos cuestan dinero, tiempo en conteos, etc. y estos deberían determinar automáticamente los días de caza en función de los conteos y datos de capturas anuales. No podemos estar todas las temporadas discutiendo días de caza generalizados. El que tenga perdiz deberá cazar los días que le correspondan. Las pequeñas partidas presupuestarias con las que se subvenciona a los cazadores para mejoras de hábitat, son de agradecer y cumplen su misión de mantener la ilusión, pero a todas luces insuficientes para paliar el grave problema de hábitat, que afecta a muchas otras especies que no se cazan, y cuya solución compete a la Administración  y depende de lo que esta haga principalmente con la agricultura.

No se nos puede trasladar a los cazadores una responsabilidad que es de la Administracion como es la mejora del hábitat. En los últimos años las sociedades de cazadores han perdido al menos un tercio de sus socios y reducir demasiado los días de perdiz, a sabiendas de que la principal causa de su declive no es su caza sino la degradación medioambiental. Por ello estamos en contra de una medida de este tipo ya que pondría en peligro la viabilidad de muchas de ellas por pérdida de socios que lo son por y para la perdiz.

En cuanto a la liebre europea se solicitó que en los cotos que tengan ejemplares suficientes para ser cazados no se limiten los días y se den precintos para así poder entrenar los perros sin muerte.

Dispositivos electrónicos para la becada

En cuanto a la becada, tras proponer Medio Ambiente que se autorizara desde el 12 de octubre hasta 31 de enero de 2018 utilizando perros provistos de campanilla tradicional o electrónica, y que en caso de emplear campanilla electrónica, ésta debería emitir sonido permitiendo, en todo momento, localizar los perros y prevenir accidentes con otros usuarios del monte. Siendo novedad que se permitiera el empleo del mando de aparatos de geolocalización (GPS) exclusivamente en la búsqueda de perros extraviados y, en todo caso, sin arma.

Ante ello, los representantes de los cazadores no estuvieron de acuerdo aduciendo que dado que es un sistema que se utiliza mucho se debería abrir un plazo suficiente para un debate más extenso sobre ello, proponiendo la Comisión Asesora que la campanilla tradicional deberá siempre acompañar a cualquier otro dispositivo, mencionándose que en un futuro hay posibilidad que se prohíban o regulen más restrictivamente  los referidos dispositivos electrónicos, así como los días de caza.