El Síndico catalán pide un examen psicológico para obtener la licencia de armas
El Síndico de Agravios de Cataluña reclama un debate sobre la situación de la caza y propone que las licencias de armas sólo se puedan expedir en centros autorizados con un reconocimiento psicológico adicional realizado por la Seguridad Social. Estas peticiones surgen a raíz de la investigación abierta tras el asesinato de dos agentes rurales en un coto de caza el pasado mes de enero. Ismael Rodríguez, el autor del crimen, portaba una escopeta de caza sin tener la licencia de armas necesaria.
El Síndico de Agravios de Cataluña propone que los informes de aptitudes psíquicas y físicas para la obtención de licencias de armas sólo se puedan expedir en centros autorizados y que, además, se aporte un reconocimiento psicológico realizado por especialistas de la Seguridad Social.
Esta es una de las recomendaciones del Síndico de Agravios, Rafael Ribó, en una investigación que abrió a raíz de la muerte de dos agentes rurales en un coto de caza de Aspa (Lérida), el pasado mes de enero, según informa la oficina del Síndico en un comunicado.
Más allá de constatar que es necesario reforzar las medidas de protección y seguridad del Cuerpo de Agentes Rurales, el Síndico reclama también un debate más amplio sobre la situación del ámbito de la caza en Cataluña.
Ribó ha considerado que el Parlament de Cataluña debe elaborar una ley de caza propia, de acuerdo con el modelo normativo que previamente se haya debatido y acordado, lo que debería comportar un traspaso de competencias por parte del Estado a la Generalitat en este ámbito.
También recomienda que se apruebe el reglamento sobre la seguridad y la protección de los agentes rurales que determine en qué situaciones se deberían llevar armas, así como el tipo de armamento.
Este reglamento es una reivindicación histórica de los Agentes Rurales, y el Síndico aboga por su aprobación «con diligencia».
Tampoco disponen los agentes rurales de una prevención de riesgos adecuada, según el informe de la oficina del Síndico, que añade que hay que dotar a este cuerpo «de los elementos de protección necesarios para el ejercicio de sus funciones y ofrecer la formación suficiente para usarlos».
El Síndico constata que entre los agentes rurales y los Mozos de Escuadra «no hay un protocolo ante las inspecciones y el control sobre los permisos de armas», aunque sí hay un protocolo de coordinación, que no existe, en cambio, con la Guardia Civil.
Por ello, propone que en la próxima Junta de Seguridad se elabore un protocolo concreto y específico en materia de inspecciones y controles sobre permisos de armas que prevea el intercambio de información entre el Ministerio del Interior y los departamentos de Interior y el de Agricultura, Ganadería y Pesca.
Informa agroinformacion.com