Medio Ambiente gallego prevé revisar los baremos para subir el precio de reses muertas por el lobo
La Consejería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras de Galicia está inmersa en la revisión de los actuales baremos para calcular el valor de los animales muertos por ataques de lobos. Pretende con esa medida acercarse más al valor del mercado en los pagos a realizar a los ganaderos afectados. Una iniciativa desvelada ayer por la directora general de Conservación de la Naturaleza, Ana Díaz, en la reunión mantenida en Santiago con una delegación de Uniones Agrarias (UU. AA.), con su secretario comarcal al frente, Román Santalla, y ganaderos afectados en Deza y Tabeirós-Tierra de Montes por la acción de estos cánidos.
La reunión fue solicitada por la organización agraria para analizar la situación que se vive en las comarcas, con periódicos ataques de lobos y pérdidas de reses por los ganaderos. Trasladaron propuestas concretas de actuación para garantizar la conservación de los lobos pero a la vez prevenir sus ataques a los rebaños e indemnizar a precios de mercado por los daños causados en la cabaña ganadera.
Entre las medidas propuestas figuran «controles poblacionales mediante caza selectiva en las zonas de mayor incidencia por daños» y la posibilidad de «alimentación disuasoria de las manadas, bajo criterios científicos y técnicos, que permitan reuducir la predación del lobo sobre el ganado de la comarca». Medio Ambiente estudiará también la petición de introducir pagos del lucro cesante por daños colaterales y revisar la zonificación de la baremación de las ayudas, en vigor con datos del 2003.
La directora general expuso en el encuentro la puesta en marcha de un plan de choque para agilizar los pagos atrasados en los expedientes por daños de estos cánidos, como reivindica UU. AA. en los últimos tres años. La previsión aportada por Ana Díaz establece la liquidación durante este mes de los atrasos del 2015, habiéndose abonado ya los del 2014 y a partir de mayo se empezarían a abonar los daños de este ejercicio 2016.
La directora general también expuso los primeros avances correspondientes al censo de población de lobos publicados por el Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente. Unos datos que establecen la no disminución de la presencia de ejemplares en Galicia en estos últimos años. De esta forma se daría cumplimiento a los objetivos de gestión del Plan del Lobo de Galicia. Esa situación abre las puertas, según explicó a los ganaderos y organización agraria, a poder autorizar alguna caza puntual de cánidos en zonas especialmente conflictivas.
Ana Díaz informó de las gestiones con Medio Rural con el fin de colaborar y dar cobertura legal al depósito de carroña de caballos muertos en el monte. Una acción para alimentar a los lobos que se hacía antes de la crisis provocada por la aparición de vacas local. Están dándose así los primeros pasos para aportar ese alimento adicional en el monte. Desde UU. AA. mostraron además su disposición a colaborar y buscar fórmulas de convivencia con la ganadería. «Que el peso de la gestión del lobo no recaiga únicamente en las rentas de los ganaderos», dijo Santalla.
Informa: lavozdegalicia.es