1.500 euros de multa y 4 meses de prisión por utilizar lazos y herir a un perro con ellos
El acusado ha sido condenado a ocho meses de inhabilitación especial para realizar cualquier tipo de trabajo realizado con animales, incluida la caza
El perro fue liberado del lazo por agentes del Seprona en situación de asfixia
Redacción | Un hombre ha sido condenado por la utilización de lazos ilegales no selectivos en un coto de Niebla (Huelva) y por un delito de maltrato animal al quedar un perro atrapado ellos.
El juicio se ha celebrado en un juzgado de la también localidad onubense de Moguer y la sentencia ha sido dictada tras la conformidad del acusado.
Delito contra la fauna y de maltrato animal
El acusado ha sido condenado a 4 meses de prisión (no entrará a la cárcel al no cumplirse el mínimo establecido) y a una multa de 1.500 euros a razón de seis euros diarios durante ocho meses. Los delitos por los que se le han juzgado han sido el de delito contra la fauna por la colocación de los lazos de acero y el de maltrato animal por haber quedado atrapado un perro en ellos habiendo sufrido daños. Además, el acusado ha sido condenado a ocho meses de inhabilitación especial para realizar cualquier tipo de trabajo realizado con animales, incluida su tenencia, y un año de inhabilitación para cazar.
El perro tuvo que ser rescatado por los agentes del Seprona y presentaba síntomas de asfixia producidos por la presión del lazo.
Método muy utilizado por furtivos
Los lazos ilegales son utilizados por personas que practican el furtivismo y su utilización está totalmente prohibida al no ser un método selectivo.
El pasado año, agentes de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, en un paraje del término municipal de Turre, encontraron cuatro jóvenes jabalíes muertos atrapados por este método.
En 2017 otro furtivo también fue condenado a una multa de 2.400 euros, inhabilitación de dos años para poder cazar por atrapar a un corzo con uno de estos lazos ilegales. También tuvo que pagar al coto el valor equivalente al corzo capturado.
Los casos de furtivismo con este tipo de métodos prohibidos son numerosos, algo contra lo que lucha el sector de la caza y que rechaza totalmente por su poco respeto con el medio ambiente, el daño que inflige a los animales y por ser unos métodos totalmente ilegales.